La mamá de Johnny – Loyds

Emecé (2021)
272 páginas.

SINOPSIS:

Paulette es una señora de alta alcurnia o «GCU» (gente como uno) que pisa los sesenta años. Divorciada de un marido «de toda la vida» que la abandonó para casarse con una mujer más joven, dolorida y sola por primera vez, decide un día bajarse de la calesita de alcohol y pastillas que la mantiene en vacilante funcionamiento. Con un hijo internado por sobredosis, otro acusado de violencia de género y una hija que casi no le habla, intenta salir adelante con la ayuda de Alcóholicos Anónimos y una buena cuota de sexo que, para su sorpresa, se le ofrece a cada paso sin gran esfuerzo de su parte. Poco a poco va recuperando algo de control y de distancia para contemplar los considerables problemas que la asedian.

RESEÑA:
Un retrato ácido de la alta sociedad argentina, esa de la que muy pocos hablan dentro de la literatura contemporánea.

Paulette lo tiene todo pero a la vez no tiene nada: mucho dinero para costearse las vacaciones más lujosas, las prendas más costosas y las bebidas de moda que la ayudan a olvidar.

A sus cincuenta y ocho años, ve como toda su estructura se desvanece y se siente de otro pozo. Se siente incomprendida no solo por sus amigas, sino también por sus hijos, con quienes mantiene una relación fría y dispersa. Se cuestiona su rol como madre y como mujer, recién a esa edad.

Tratando de huir de sus adicciones, Paulette inicia un tratamiento en Alcohólicos Anónimos, lo que la lleva a conocer a un hombre mucho más joven con el cual decide explorar su sexualidad.

Sin embargo, hay muchas trabas que esta se autoimpone a la hora de relacionarse. Los prejuicios son muy fuertes en esta trama y hasta rozan un cariz humorístico. El lector se puede horrorizar y al mismo tiempo reírse a carcajadas con las ocurrencias de Paulette.

Hay una voz que oficia de segundo narrador, si bien toda la novela transcurre en primera persona: la consciencia de Paulette, quien la castiga constantemente.

Con una destreza narrativa, Loyds nos sumerge en un mundo feroz sin analgésicos ni eufemismos. Una lectura frenética. Una novela imposible de soltar.

9/10⭐️